News Herald – Juliann Talkington
Con todas las presiones de la vida adulta, muchos padres quieren estar seguros de que la infancia sea divertida y llena de recuerdos positivos. ¿Significa esto que debemos esperar para enseñar a nuestros hijos acerca de la responsabilidad? Probablemente no.
Las personas responsables saben cómo cuidar de sí mismos, su familia, sus amigos y la comunidad. Ellos son confiables, de confianza, de conciencia, fiable, sensible y responsable de sus actos.
Es poco realista esperar que los jóvenes se conviertan en responsables cuando llegan a la edad adulta. En cambio, la responsabilidad debe ser enseñada gradualmente. Dado que no hay mucho que aprender, el proceso de enseñanza debe comenzar cuando los niños son muy jóvenes.
La mejor manera de enseñar la responsabilidad a los niños es con el ejemplo. Si se puede confiar y es bueno acerca de mantener los compromisos y pensar antes de actuar y es más fácil para esperar lo mismo de su hijo. En otras palabras, si usted se compromete a ir a un partido de fútbol de su hijo, asegúrese de que está allí.
También, es importante dar sus funciones secundarias. Muchos padres subestiman lo que un niño puede hacer. A los niños pequeños les encanta estar involucrados y tomar orgullo en el manejo de una “tarea de adultos”. Por ejemplo, es razonable esperar que un niño de tres años limpie su espacio después de comer. Cuando un niño es mayor, debe ser responsable de sus tareas y mantener su cuarto limpio.
Además, es importante establecer reglas y consecuencias. A continuación, asegúrese de seguir con el mismo pensamiento. En la vida adulta, existen sanciones por malas decisiones, por lo que es importante que el niño entienda el vínculo entre las decisiones y las consecuencias.
A continuación, asegúrese de que usted permite que su niño practique. Para que la práctica sea eficaz, es importante no microgestionar. Su hijo tiene que cometer errores, para que pueda aprender de ellos. Por ejemplo, pídale a su niño que le diga lo que tiene para hacer de tarea. Deje que él haga el trabajo. Luego, asegurarse de que todo está hecho. Si él sigue sin completar el trabajo, asegúrese de que haya consecuencias.
Celebre el éxito. Los niños necesitan saber cuando han hecho un buen trabajo. Este paso ayudará a reforzar el buen comportamiento.
Por último, amplíe el ámbito de aplicación. A medida que su hijo crece y madura es importante para él asumir más y más responsabilidades, para que siga aprendiendo y creciendo.
Y recuerde, la enseñanza de la responsabilidad crea oportunidades para la diversión, para que pueda construir recuerdos mientras prepara a su hijo para el futuro.
Juliann Talkington, fundadora de la Escuela Internacional Renaissance, (www.rschoolgroup.org). Para más información, puede ponerse en contacto a través de jtalkington@rschoolgroup.org o al 850-873-6981.