Abc Laura Peraita

Estar encerrados en casa tantas horas es la excusa perfecta de muchos niños para pedir a sus padres que les dejen jugar con las nuevas tecnologías. Los progenitores, que en muchos casos teletrabajan, se encuentran ahora en la contradicción de dejarles el acceso, cuando antes se lo tenían limitado, a todas horas para que, de esta forma, mientras los pequeños están entretenidos, los padres puedan atender con más calma sus obligaciones laborales. El coronavirus, en este sentido, está volviendo el mundo al révés.”(more)